El continente olvidado
por excelencia, la cuna del hombre.
Cuando pisas su tierra
queda impregnada en tí y va contigo allá dónde
tu vayas. Su textura puede ser suave como la seda o bruñida y
trabajada como las manos de sus hombres y mujeres.
África es
espeluznantemente bella ,capaz de lo mejor y lo peor. Es capaz de
evocar tristeza y alegría al mismo tiempo, arrancarte una
carcajada y desplomarte en un sollozo. A veces dormida y desconsolada
otras eternamente viva.
Su ritmo a veces te
arrastra y atropella ,otras te mece lentamente y acuna el estress
característico de occidente en un sopor pausado y profundo.
Sentirla y vivirla te
llena de energía a la vez que te inmoviliza.
Su aroma natural a
tierra, a hoja a fruta puede embriagarte, pero esa naturalidad sin
falsos perfumes sintéticos también puede llegar
afixiarte.
Sus gentes duras,
aparentemente impenetrables te abrazan y acogen sin esperar nada a
cambio.Los niños inocentes y puros te dan lecciones de vida.
África la madre
naturaleza, la tierra saqueada.
Lugar de culturas
ancestrales, la gran desconocida. Sus ritmos y danzas te hipnotizan.
A veces vibrante y sonora otras tan callada y silenciosa.
África la tierrra
de las contradiciones no deja a nadie indiferente...
 |